Cuando narro , me despojo de mi vestido de palabras. Me doy, me prolongo, me entrego.. .Entonces contemplo el milagro de volverme - por un instante-jaula vacía mientras veo multiplicados -para siempre- sobre otros cielos, otros rostros … los mil pájaros de mi fantasía…
Vilma Novick Freyre
“Los que han asumido las responsabilidades de este arte y se entregan al numen que se oculta detrás de él son descendientes directos de una inmensa y antigua comunidad de santos, trovadores, bardos, griots , cantadoras, cantores , poetas ambulantes, vagabundos, brujas y chiflados…”
Clarisa Pinkola Estés.
¿Por qué soy Cuentera ambulante?
Fragmento de mi ponencia “De contadas y lecturas… un tema cardiológico”
“Allí donde esté tu tesoro estará también tu corazón” .(Mt 6, 21) .Mi tesoro es el patrimonio de ternura que poseo desde mi más tierna infancia y lo guardo aquí en el pecho.
Basta dar vuelta las páginas de mi historia para encontrarme con el brazo enorme de mi papá en su cama grande, donde como un gigante de amor me contaba cuentos que él mismo inventaba para mí. Acurrucada a su lado ,pegada a lo largo de su gigantesca anatomía ( de acuerdo a mi visión de niña menuda, porque después el tiempo me demostró que era apenas un poquito más alto que mi tamaño de mujer adulta)me hipnotizaba con su voz, me encantaba como a las serpientes, con la música de las palabras.
Yo me dejaba raptar para meterme por los laberintos de la imaginación a mundos impensados. Otras veces lo miraba extasiada a los labios y a cada movimiento que ellos realizaban debajo del alero espeso y rubio de sus bigotes. ¿Dónde se escondía la magia…entre sus dientes, en la lengua, en la garganta? …Ya desde aquel entonces yo tenía la certeza que se alojaba en su corazón porque era tan maravilloso como el amor que me daba. Por eso traigo navegándome las venas este arte ,esta profesión de encantadora y contadora . Es mi génesis de narradora y como las matrioshkas -Esas muñecas rusas- soy una dentro de otra y me habita otra dentro de esa otra, multiplicándome en cientos de otras .
Mi papá se adelantó a la era televisiva y me contó los cuentos en capítulos hasta que le bajaba el sueño y los dejaba en el momento de mayor tensión. Durante el día los personajes y las acciones tomaban vida en mí . Hubo algunos que duraron años.
Yo tuve a mi Sherezade versión rusa y masculina . Soy heredera de “Las mil y una noche de un inmigrante que encontró su derrotero como guarda de trenes”…El Ruso ferroviario, mi papá . El marcó con su fantasía el boleto de mi vida.
El problema surgía cuando lo llevaban a “la línea” y demoraba cuatro o más días en volver. Los personajes y las acciones me desbordaban. Les buscaba desenlaces diferentes y eso potenció mi imaginación. Es mi génesis de escritora. Además ejercitó mi memoria porque cada noche –como un ritual, me preguntaba ¿en qué parte del cuento habíamos quedado? Y yo era una máquina de explicaciones y narración espontánea. Hace poco tiempo me confesó que hacía eso ,no para ejercitar mi atención y memoria, sino para que le diera pie y seguir inventando porque ni él se acordaba ,ya que a veces me contaba semidormido.
Al recordar todo esto siento que el corazón se me estremece y se acelera mi pulso.
George Sand , decía:“El intelecto busca, pero es el corazón quien halla.”
Tratando de imitar a mi maestro -mi papá- con los dones que me dio genéticamente ,además de los que atesoré con su tiempo y ternura, yo también comencé a darme en mi ciudad y sus alrededores…
Contando cuentos en cualquier lugar –aunque me vieran como una “rara” porque de esto hace 4o años. En la escuela como maestra, en el profesorado formando docentes ( o deformándolos como pensaron en el tiempo del Proceso ). Siempre había un rincón para esa magia palabrera y si no lo inventaba, pero me sentía sola…
Hasta que conocí a gente que estaba en el mismo derrotero y supe que no estaba sola . A partir de allí tomé el empuje que me faltaba para dedicarme a este arte de cuentera ambulante.
Me costó… no es fácil, pero aquí estoy…Con mucho camino recorrido y todavía con impulso para recorrer. Visité escuelas, plazas, centros culturales, Ferias de libros, pub,cines, teatros,iglesias, desde ciudades importantes hasta los rincones más insólitos, me interné en plena sierras, llegué a escuelas- albergue de las altas cumbres, fui a hospitales , cárceles y hasta tuve la oportunidad de narrar en la escuela del Mundo Unido en el Castillo de Duino , Italia.
Hoy…me abriga el alma encontrarme con personas de distintas edades que me agradecen por un cuento que les conté y que los habita desde entonces.
Vilma Novick Freyre
“Los que han asumido las responsabilidades de este arte y se entregan al numen que se oculta detrás de él son descendientes directos de una inmensa y antigua comunidad de santos, trovadores, bardos, griots , cantadoras, cantores , poetas ambulantes, vagabundos, brujas y chiflados…”
Clarisa Pinkola Estés.
¿Por qué soy Cuentera ambulante?
Fragmento de mi ponencia “De contadas y lecturas… un tema cardiológico”
“Allí donde esté tu tesoro estará también tu corazón” .(Mt 6, 21) .Mi tesoro es el patrimonio de ternura que poseo desde mi más tierna infancia y lo guardo aquí en el pecho.
Basta dar vuelta las páginas de mi historia para encontrarme con el brazo enorme de mi papá en su cama grande, donde como un gigante de amor me contaba cuentos que él mismo inventaba para mí. Acurrucada a su lado ,pegada a lo largo de su gigantesca anatomía ( de acuerdo a mi visión de niña menuda, porque después el tiempo me demostró que era apenas un poquito más alto que mi tamaño de mujer adulta)me hipnotizaba con su voz, me encantaba como a las serpientes, con la música de las palabras.
Yo me dejaba raptar para meterme por los laberintos de la imaginación a mundos impensados. Otras veces lo miraba extasiada a los labios y a cada movimiento que ellos realizaban debajo del alero espeso y rubio de sus bigotes. ¿Dónde se escondía la magia…entre sus dientes, en la lengua, en la garganta? …Ya desde aquel entonces yo tenía la certeza que se alojaba en su corazón porque era tan maravilloso como el amor que me daba. Por eso traigo navegándome las venas este arte ,esta profesión de encantadora y contadora . Es mi génesis de narradora y como las matrioshkas -Esas muñecas rusas- soy una dentro de otra y me habita otra dentro de esa otra, multiplicándome en cientos de otras .
Mi papá se adelantó a la era televisiva y me contó los cuentos en capítulos hasta que le bajaba el sueño y los dejaba en el momento de mayor tensión. Durante el día los personajes y las acciones tomaban vida en mí . Hubo algunos que duraron años.
Yo tuve a mi Sherezade versión rusa y masculina . Soy heredera de “Las mil y una noche de un inmigrante que encontró su derrotero como guarda de trenes”…El Ruso ferroviario, mi papá . El marcó con su fantasía el boleto de mi vida.
El problema surgía cuando lo llevaban a “la línea” y demoraba cuatro o más días en volver. Los personajes y las acciones me desbordaban. Les buscaba desenlaces diferentes y eso potenció mi imaginación. Es mi génesis de escritora. Además ejercitó mi memoria porque cada noche –como un ritual, me preguntaba ¿en qué parte del cuento habíamos quedado? Y yo era una máquina de explicaciones y narración espontánea. Hace poco tiempo me confesó que hacía eso ,no para ejercitar mi atención y memoria, sino para que le diera pie y seguir inventando porque ni él se acordaba ,ya que a veces me contaba semidormido.
Al recordar todo esto siento que el corazón se me estremece y se acelera mi pulso.
George Sand , decía:“El intelecto busca, pero es el corazón quien halla.”
Tratando de imitar a mi maestro -mi papá- con los dones que me dio genéticamente ,además de los que atesoré con su tiempo y ternura, yo también comencé a darme en mi ciudad y sus alrededores…
Contando cuentos en cualquier lugar –aunque me vieran como una “rara” porque de esto hace 4o años. En la escuela como maestra, en el profesorado formando docentes ( o deformándolos como pensaron en el tiempo del Proceso ). Siempre había un rincón para esa magia palabrera y si no lo inventaba, pero me sentía sola…
Hasta que conocí a gente que estaba en el mismo derrotero y supe que no estaba sola . A partir de allí tomé el empuje que me faltaba para dedicarme a este arte de cuentera ambulante.
Me costó… no es fácil, pero aquí estoy…Con mucho camino recorrido y todavía con impulso para recorrer. Visité escuelas, plazas, centros culturales, Ferias de libros, pub,cines, teatros,iglesias, desde ciudades importantes hasta los rincones más insólitos, me interné en plena sierras, llegué a escuelas- albergue de las altas cumbres, fui a hospitales , cárceles y hasta tuve la oportunidad de narrar en la escuela del Mundo Unido en el Castillo de Duino , Italia.
Hoy…me abriga el alma encontrarme con personas de distintas edades que me agradecen por un cuento que les conté y que los habita desde entonces.
Vilma Novick Freyre
“Hay que escuchar con el oído del alma, pues esta es la misión del cuento”.
Recibió el Premio Maitén 2008 por su trayectoria como narradora oral.
Coordina el grupo ParacontArte .Narradoras orales para adultos.
“Hay que escuchar con el oído del alma, pues esta es la misión del cuento”.
Recibió el Premio Maitén 2008 por su trayectoria como narradora oral.
Coordina el grupo ParacontArte .Narradoras orales para adultos.
Sigue su recorrido por los laberintos donde necesitan que se cuente un cuento
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